Como respuesta a la pandemia de COVID-19, las investigaciones relacionadas con la salud se han multiplicado y se están conduciendo ensayos clínicos y otras investigaciones con seres humanos para buscar tratamientos y vacunas eficaces y seguros para COVID-19. En este contexto, los comités ético-científicos deben estar preparados y organizados para realizar una revisión ética rigurosa de las investigaciones y, a su vez, contar con procesos rápidos y flexibles para dar una respuesta eficiente a los tiempos y necesidades de la emergencia sanitaria.